El
Ayuntamiento de Córdoba ha puesto en marcha una iniciativa a la que llama
participativa, bajo el lema de 50 barrios 50 obras: la ciudad que queremos.
Pues bien, esto me ha llevado
a hacerme la siguiente reflexión:
En
la actualidad, cuando tenemos garantizadas las libertades por un texto
constitucional, por unas instituciones democráticamente establecidas y por la
presencia activa de las entidades ciudadanas que tienen mucho interés en ello,
el objetivo de conseguir una ciudad mejor, en la línea que van marcando las
propuestas ciudadanas, sigue teniendo la validez de siempre e incluso resulta
mucho mas asequible.
Cuando
nos planteamos desde las asociaciones de vecinos la ciudad que queremos, no
podemos limitarnos a redactar una lista de reivindicaciones; se plantea algo
más profundo: pretende ser el reflejo de una inspiración natural y generalizada
a alcanzar un mejor nivel de vida urbana para toda la población cordobesa.
La
ciudad la constituimos las personas, no solo las casas, las calles o plazas, y
las condiciones en que se desarrolla nuestra vida en un ambiente urbano.
Valorando
debidamente la importancia de votar y elegir entre personas y programas
distintos, es preciso manifestar la necesidad de la participación, puesto que
es en el pueblo donde radica la soberanía popular.
Córdoba,
ciudad de participación:
Quiero
resaltar la importancia de la participación popular. Para las asociaciones de
vecinos de Córdoba participar debe significar sentirse parte y ofrecer la propia
colaboración, opinión crítica y también el trabajo voluntario, a fin de ir
construyendo la ciudad que queremos, con el esfuerzo de todos.
Queremos
ejercer firmemente el derecho a participar que nos otorga las leyes y que moralmente
nos corresponde por el gran bagaje acumulado a lo largo de muchos años de
experiencia participativa.
Córdoba,
ciudad de urbanismos equilibrado:
Aspiramos
a poder vivir en una ciudad equilibrada, en condiciones ambientales, culturales,
de infraestructura, que sean determinadas en función de sus habitantes.
Hay
que preservar la idiosincrasia de nuestra ciudad para reforzar nuestras
peculiaridades, no solo urbanas, si no históricas y culturales. Lograr que la gente
aprecie nuestra ciudad, se sienta agusto en ella y se identifique con la misma.
La
planificación urbanística de la ciudad debe mantener el objetivo fundamental de
corregir los desequilibrio y de completar su trama urbana.
Por
lo que atañe a equipamientos sociales públicos, siendo consciente de que estos
últimos años se ha producido un cambio cualitativo y cuantitativo muy
importante, la población exige instalaciones más adecuadas y suficientes para
la practica del deporte y otras actividades formativas culturales y de ocio.
Córdoba
ciudad organizada:
La
aportación de ciudadanos y ciudadanas autoorganizados en diferentes asociaciones
y entidades han contribuido, sin duda, a conseguir una ciudad más organizada y
más vertebrada; la creciente integración de estas aportaciones ciudadanas en el
interior de la institución municipal con las inevitables contradicciones que
ello haya podido reportar, ha transformado córdoba en una ciudad mucho más
organizada en el ámbito social y cultural. En este sentido, hay que seguir
profundizando en la participación, posibilitándola desde la administración.
Córdoba,
ciudad segura:
Entiendo
el concepto de “seguridad ciudadana” como algo más que “poder ir tranquilo por
la calle”. Este deseo solo puede ser fruto de una recuperación de la vida
ciudadana en todos sus aspectos. No comparto la opinión de que una mayor
presencia policial en la vida pública tiene que resolver el problema de la
inseguridad ciudadana que algunos sectores de la población manifiestan estar
sufriendo.
Actuaciones
policiales si, pero también el trabajo ciudadano permanente de ir aportando
nuestra propia colaboración.
Apoyo
al proyecto de policía de barrio entendido desde la cercanía y la eficacia.
Córdoba,
ciudad saludable:
Debemos
apuntar hacia el desarrollo de una cultura y conciencia más ecologista, en el
sentido más amplio de la palabra. Debemos seguir trabajando para crear en
nuestra ciudad unas condiciones medioambientales que además de no perjudicar la
salud, fomenten el bienestar de la misma, la eliminación de la contaminación,
humos, ruidos, malos olores industrias molestas, excrementos de animales,
despilfarro de energía, etc…
Debemos
fortalecer la conciencia de que vale la pena cambiar el estilo de vida
consumista que se nos impone diariamente; no al crecimiento desenfrenado hacia
la consecución del máximo beneficio económico.
Vida
y salud son elementos que van íntimamente relacionados. Hay que favorecer la
salud, para ello sería necesario un cambio de hábitos y una practica creciente
de las actividades lúdico deportivas.
Córdoba
ciudad solidaria:
Sabemos
que en Córdoba coexisten, uno al lado del otro, el lujo y consumismo más alto,
junto con situaciones de verdadera miseria y marginación. Esta marginación
social, que tiene sus raíces en la misma distribución injusta de los recursos
disponibles a nivel mundial, nacional y local.
La
sociedad capitalista de bienestar ha demostrado ser incapaz de resolver la
problemática que aquejan a las capas sociales más débiles.
Hay
que contribuir a la creación de las condiciones de vida que permitan la
desaparición de las causas que provocan la marginación y en la adopción de
medidas adecuada para combatirla.
La
drogadicción, sobre todo entre los jóvenes; la familias desestructuradas, sobre
todo los niños y mujeres que sufren más directamente sus consecuencias
negativas; las personas mayores, los discapacitados físicos y psíquicos, las
minorías étnicas; los inmigrantes sin recursos propios, las personas que están
amenazadas con la perdida de su vivienda, son colectivos por los que se trabaja
desde las asociaciones de vecinos.
Si
partimos de unos objetivos generales que hablen de la transformación de la
sociedad, de lucha contra las marginaciones, de espíritu critico, de
participación, de solidaridad, de autoorganización popular ¿Cuál puede ser
nuestro trabajo?
1.-Organizar
la participación.
2.-Impulsar nuevos valores en la sociedad.
3.-Recuperar y
crear nuevas señas de identidad.
4.-Colaborar con las instituciones.
5.-Crear y
consolidar tejido social.
ANTONIO
DE LA ROSA PAREJA
PRESIDENTE
DEL CONSEJO DE DISTRITO SUR