Esta semana hemos asistido a la puesta de largo de la Ribera. Unas obras que han supuesto un cambio radical de la zona, y de ello los vecinos del Distrito Sur nos sentimos especialmente satisfechos.
Pero la felicidad no es completa, por la decisión del Ayuntamiento de permitir el paso del transporte público, algo negativo, y a lo que nos oponemos con rotundidad.
En el pasado, había colectivos que abogaban por la semipeatonalizacion, ello ante el temor de que nuestros barrios se vieran perjudicados por el intenso tráfico que iban a soportar. Después de tres años, el tráfico se ha normalizado, se están usando otras vías alternativas (la ronda), y hemos empezado a disfrutar de un espacio abierto, ganado al tráfico rodado.
Con la decisión de permitir el transporte público, entendemos que se abre un portillo para la reivindicación de otros colectivos o sectores de la ciudad que se verán discriminados: ¿por qué el transporte sí y los residentes no?; ¿se permitirá el paso del bus turístico? ¿y por qué no los coches de caballos? ¿y los autobuses turísticos?
Debe primar el interés general de los ciudadanos de Córdoba frente al de sectores determinados.
No podemos permitir que la gran inversión que ha supuesto una transformación vital de la zona comience a degradarse con la contaminación (también visual y acústica) que supone el paso del transporte público por el entorno de la Ribera.
Ya que hemos conseguido que el río y la ciudad tengan una relación rica y próspera, que la ciudad ha vuelto a abrazar al río a través de nuevos espacios, nuevos puentes y nuevos proyectos de recuperación, no podemos permitirnos perder ese espacio de paseo, contemplación y disfrute para la ciudadanía.
Indicar que el abrazo del río a la ciudad no será completo hasta tanto no se acometan todos los proyectos de la otra orilla y un plan del propio cauce.
Los usos de los espacios creados en torno al río, así como de las actividades a desarrollar en ellos, son múltiples y van en función de las oportunidades que crea el propio espacio, de la iniciativa personal de sus usuarios y de las provocaciones que directa o indirectamente se ofrezcan desde los diferentes colectivos o instituciones que quieran implicarse, y una buena forma sería poner en marcha una oferta educativa y de ocio de calidad en esos nuevos espacios que se han creado.
Antonio de la Rosa
Presidente del Consejo de Distrito Sur
PUBLICADO EN EL DIARIO DE CORDOBA EL 03/02/13
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