Los activistas de la Acampada Dignidad, enganchando una boca de riego. MADERO CUBERO
La Acampada Dignidad engancha una boca de riego que Emacsa tapió y volvió a dejar libre tras una feria junto a la Calahorra y denuncia las “mentiras del alcalde” con el proceso de gestión del inmueble
El antiguo grupo escolar Rey Heredia, ocupado desde octubre por la Acampada Dignidad, vuelve a tener agua potable. Esta mañana, activistas de la Acampada Dignidad han enganchado una manguera a una boca de riego recientemente destapada por la empresa municipal de agua potable Emacsa para una feria que se instaló junto a la torre de la Calahorra hace un par de semanas. La boca de riego era la que usaba de forma habitual la Acampada Dignidad para tener agua, pero fue hormigonada y tapada por Emacsa. Hasta esta mañana, Rey Heredia se surtía de agua de las fuentes, en las que los activistas llenaban bidones con los que surtían, por ejemplo, la cocina social.
Acampada Dignidad ha querido destacar el acto de volver a engancharse a la red de agua potable como una acción importante de “rebelión” ante lo que considera una campaña de “acoso” y “represión” por parte del Ayuntamiento, según su portavoz, Rafael Juan. De hecho, ayer, medio centenar de activistas de la Acampada Dignidad fue desalojado del Pleno, al que acudieron a protestar por la falta de agua potable en el centro.
Además, el colectivo convocó una rueda de prensa para denunciar “las mentiras del alcalde”, José Antonio Nieto, sobre el proceso de gestión del antiguo colegio Rey Heredia. El Consistorio defiende que estaba prevista la cesión del edificio a los vecinos del Distrito Sur antes de que se iniciara la ocupación de Rey Heredia, en octubre del año pasado, y que la misma ha retrasado el proceso, según dijo el portavoz del gobierno municipal, Miguel Ángel Torrico. No obstante, Acampada Dignidad sostiene que hasta noviembre de 2013, un mes después de iniciada la ocupación, el Ayuntamiento no solicitó la “desafección” del colegio a la Consejería de Educación, a pesar de las “insistentes” demandas de los vecinos.
Así, Rafael Juan aseguró que los niños abandonaron el colegio en diciembre de 2011 y que ya en abril de 2012 el consejo de distrito le reclamó al Ayuntamiento la cesión del mismo. Además, agregó que hubo otras peticiones en junio de ese año, en septiembre, en octubre, y en mayo y junio de 2013. También rechazó las acusaciones de que entraran en el edificio dando “una patada a la puerta”. Aparte, consideró que el regidor “también miente” cuando asegura que iba a abrir el centro de forma inminente, ya que hay “muchos edificios municipales cerrados” como la antigua cárcel de Fátima, el pabellón de la Juventud, la escuela Félix Ortega, el antiguo Ayuntamiento, el polideportivo Fidiana, locales en el barrio del Guadalquivir y ahora el centro de visitantes de la Puerta del Puente.
Perol solidario celebrado junto a la Calahorra. | MADERO CUBERO
Acampada Dignidad también denunció que en una reunión con el consejo de distrito “el alcalde se comprometió a ceder Rey Heredia al día siguiente” de que se presentara un plan de usos que ya posee y que los activistas “saldrán” del edificio ese mismo día, cuando se consume la cesión, por lo que rechazan “las acusaciones de apropiación”.
Por otra parte, el colectivo mantiene clausurada por reformas la cocina social en la que “comen más de un centenar de personas al día” ya que aseguran que “la concejal María Jesús Botella fue a Sanidad a denunciarnos” y que se trabaja en la sustitución de utensilios y dispositivos por otros de acero inoxidable. No obstante, aseguran que todas las noches voluntarios llevan comida al Rey Heredia que se llevan vecinos sin recursos. También han abierto una escuela de verano en el centro a la que asistirán más de 50 niños y denuncian que el comedor del colegio San Fernando de la zona Sur aún no ha abierto sus puertas y se ha convocado a los padres el próximo 15 de julio para determinar cuándo podrán hacerlo.
Publicado en Cordópolis el 09/07/2014